Los coletos leían, leían mucho más que ahora, no habían periódicos nacionales, a penas Excelsior y uno que otro nacional llegaban a la Agencia de Publicaciones "Marguer", pero no pasaban de 20 ejemplares. Además llegaban vía transportes Cristóbal Colón con dos o tres días de retraso.

Eran los finales de la década de los sesentas, el mundo estaba cambiando, si bien no se sabía lo que ocurría en el D. F., sí llegaban de robote muchas cosas que no se entendían bien.

eran una miseria y los regidores eran ad-honorem, por eso nadie se paraba a gobernar en palacio municipal Y así fue como el periódico TIEMPO se tropezó con la presidencia municipal de San Cristóbal y tuvo que ser suspendido hasta que su director y su gerente (yo) superaron la etapa de damnificados por la inundación de 1973. Los tres meses que duró la presidencia municipal accidental es tema de un libro aparte. Muy interesante.

Después que pasó la tormenta y llegó la calma, como seis meses depués, ya viviendo una vida muy tranquila (como ahora), se nos ocurrió comprar un coche nuevo un máverick, salido de la agencia, nos costó $53,000.00, todo un capital. Estabamos muy felices con nuestro carro y nos íbamos a pasear por todas partes los domingos. Uno de tantos domingos fuimos a los Lagos de Montebello y de regreso al pasar por Comitán, Avendaño fue a visitar un "su" amigo y al entrar a su casa vio que en una parte tenía arrumbada una imprenta, eran miles de cosas que habían amontonadas, era parte de una vieja imprenta que parece ser fue la primera que llegó a San Cristóbal y el señor Avendaño se entusiasmó al ver aquellos fierros amontonados y máquinas raras. Salió la plática de por qué estaba esa imprenta ahí, el señor dijo que la había comprado para ponerla a trabajar pero que no había encontrado una persona que se hiciera cargo de administrarla y por lo tanto estaba ahí arrumbada. Entonces, el entusiasmado Avendaño le preguntó si la vendía y el señor dijo que lo iba a pensar. Una semana después la respuesta fue afirmativa, el señor vendía la imprenta en 40 mil pesos de contado, más tres mil del arrastre. Nosotros no teníamos dónde ponerla, había que alquilar un local y adaptarlo, a mí me parecía una locura pero para Avendaño fue muy fácil. Apenas habíamos gozado tres meses nuestro flamante máverick cuando Avendaño lo propuso en venta, otro su amigo le pagó 50 mil pesos por el coche, pagó los 40 y el arrastre y un día nos llenamos de fierros raros en el garage de la casa y nos quedamos sin carro.

FICHA NUM. 7.- NUEVA ETAPA.

No se cuantos meses pasaron, sólo recuerdo que cada vez que quería salir de la casa por la puerta del garage tenía que brincar un monton de fierros, cajas, letras, máquinas raras. La dueña de la casa donde vivíamos se negó a alquilarnos otra parte de la casa que tenía vacía, porque eran dos viejitas muy desconfiadas y no querían que hubiera nada raro dentro de su casa, por lo tanto tuvimos que buscar una nueva casa para mudarnos. A principios de 75 ya estábamos instalando la imprenta en la nueva casa, era una enorme casa que atrabezaba toda la manzana, en un lado era la casa habitación y en la otra calle se adaptó la imprenta. Era una vieja imprenta, tenía dos prensas "chandler", movidas por un pedal, dos prensas manuales y una vieja prensa modelo "Gutemberg". Cientos de cajas de tipo de todos tamaños, desde seis puntos hasta 10 centímetros, dibujos, viñetas, clisses, máquinas para hacer sellos de goma, todos los accesorios. Una vez instalada la imprenta llenaba un espacio de seis metros de ancho por 20 de largo. Ahí comenzamos nuevamenta a hacer el periódico, pero, como ya teníamos imprenta propia, lo hicimos interdirio y a veces hasta de 12 páginas. Trabajabamos 24 por 24, es decir, 24 horas de trabajo por 24 de descanso todos los días de la semana. Pero vivíamos bien porque no dependíamos del periódico. Avendaño tenía un salario de 10 mil pesos y yo ganaba cinco mil, era suficiente para sostener a la familia y al periódico que, (como ahora) no dejaba nada de ganancia pero sí había que pagar la nómina de los tipógrafos. Así debieron pasar unos cuatro años.

FICHA NUM. 8.- EL PRIMER ATENTADO.-

En 1978, los dueños de la mansión donde vivíamos aumentaron la renta al doble y ya no era posible pagarla, era demasiado lujo, de tal manera que comenzamos a buscar dónde instalar la gran imprenta. Ya habíamos comprado una casa para vivir que nos la entregarían en principios de 89, pero no había dónde poner la imprenta. Al fin encontramos un local céntrico y se hizo la mudanza. Otra vez se tuvo que suspender el periódico por el trajín del cambio. Una vez instalados en el nuevo local e instalados en nuestro nuevo y propio domicilio, Avendaño se le ocurre irse de funcionario público de altos vuelos (eso es tema de otro libro), a codearse con las esposas de los gobernadores y del señor presidente de la república, doña Carmen Romado de López Portillo.

En 1989, con el trabajo que nos había costado instalar el taller, se me hizo una marranada suspender el periódico, porque a mí me tocaba la mejor parte, es decir, la parte administrativa y, si no había forma de financiarla tendría que seguir manteniéndola de mi salario o del gasto de la casa. Fue por eso, más que por una ideología que en ausencia de Avendaño, asumí la responsabilidad total del periódico, no sólo administrarolo sino redactarlo y editarlo.

Fue otra etapa. Cuando puse mi nombre como responsable del periódico, la sociedad coleta que ya estaba bastante revuelta, empezó a agredirme y, principalmente los "compañeros" periodistas, no soportaban que yo asumiera editar un periodiquito. Cómo se manifestaban? De diversas maneras; algunos (como siempre) enviaban anónimos, otros, como Paco Flores, inventó un su periódico para hacer la competencia, otros como don Antonio Gutiérrez con agresiones casi directas en su propio periódico y, entonces comencé a darme cuenta que habían otras cosas que se podían publicar, que existían otros partidos políticos, los problemas sociales, los indígenas, la corrupción y que, el periódico no solamente era para la nota social, además yo tenía una conducta antisocial (no me gustan las reuniones de damas de alcurnia) y de vez en cuando las criticaba y eso me costó conocer el princiio de la marginación. Un año duró esta lucha que, aparte de comenzar una vida "periodística", había que atender los hijos, casi como madre soltera.

En 1980, la idea del periódico ya iba cambiando, se comenzaba a criticar más atrevidamente y, un día, el 26 de julio de 1980, despertmos a las 3.45 de la madrugada con un fuerte ruido. Escuchamos el ruido pero no le pusimos atención. Al día siguiente al abrir las purtas, nos dimos cuenta que la casa había sido balaceada, todos los cristales estaban rotos, los carros (un safari y un chevell) habían sido baleados, les rompieron los cristales, en la calle los vecinos estaban asustados y los casquillos encontrados eran de escopeta calibre 16. Varias descargas, se supone eran cuatro pistoleros que dispararon al mismo tiempo sobre las ventanas y los carros. Esa fue la primera experiencia fuera de serie.

Las investigaciones de este caso serían motivo de otro libro.

FINCHA NUM. 9.- UN NUEVO TIEMPO.-

A partir del atentado, ya existían e nuestro rededor otros amigos periodistas, Jorge, Agustín, Mario, que tenían otra visión del periodismo. Hicimos una reestructuración del periódico y comenzamos a pensar en un nuevo periódico. Para entonces la ciudad ya había cambiado mucho, los asentamientos humanos irregulares brotaban como zacate por todas partes, lae expulsiones chamulas, los desalojos, las invasiones, LOS COMUNISTAS, se habían apoderado de la santa Madre Iglesisa Católica apostólica y romana según los resagos de coletos que quedaban. Fue entonces cuando comenzamos a pensar en hacer un diario, pero para ésto había que adquirir otro tipo de maquinaria, para nosotros lo máximo sería tener una prensa plana y un linotipo y, a finales de 1980 ya lo teníamos.

Con un préstamo bancario adquirimos el primer linotipo y la prensa plana, fuimos vendiendo poco a poco la vieja imprenta para poder ir pagando la "nueva" imprenta. Pasamos dos años capacitándonos para manejar la "nueva" tecnología que era la transición de manual a mecánica, es decir 100 años de diferencia entre una y otra tecnología y 100 años de distancia de la tecnología actual. Ni siquiera sabíamos lo que significaba una computadora o el sistema de fotomecánica.

En enero de 1982 hicimos el primer periódico en este tipo de imprenta, era toda una hazaña y fue elaborado especialmente para ser distribuido durante la campaña de Miguel de la Madrid, era un muestrario de las zonas conflictivas de Chiapas. Tardamos ocho días en elaborarlo.

FICHA NUM 10.- EL CHICHONAL, OTRA TRAGEDIA

Estabamos perfeccionando nuestra capacitación, entre enero y marzo, para luego lanzarnos con el Diario Tiempo, cuando el 29 de marzo nos empezño a llover ceniza.

Nuestro taller apenas si contaba con un techo de lámina, unas tablas hacían el trabajo de pared y nustras máquinas se llenaron de ceniza. Más de 20 centímetros sobre el nivel de cualquier suelo pudimos pisar por varios días. Se acercaba la semana Santa, aún asi, llenos de ceniza, hicimos el TIEMPO, pero fue el último de esos meses, porque después era peligroso seguir usando las máquinas por el peligro que se lastimaran los engranes y se destruyeran. Tuvimos que esperar varios meses, hasta que se fue limpiando toda la ciudad, fueron toneladas de ceniza que no había dónde echarlas, más que amontonarlas en algún rincón de cada casa.

En septiembre de 1983, el 23 de ese mes, platicamos con los muchachos de la imprenta que también sufrían la escacez del salario, porque, además que estábamos todavía pagando el préstamo que hicimos al bando para comprar la maquinaria, el último año de López Portillo fue criminal, él "defendía el peso como perro", pero al final se lo acabó comiendo porque hubo una devaluación criminal y de $100,000.00 que debíamos al banco, tuvimos que pagar $300,000.00, así es que, cuando le propuse a los linotipistas y prensistas que, la única forma de salvarnos era trabajando el doble, aceptaron gustosus y, ese día, el 23 de septiembre nos pusimos a hacer un nuevo periódico, al que llamamos "Diario Hoy". Tomamos medida de tiempos y costos de elaboración. Comenzamos a buscar formas de financiamiento y, ĦOh! sorpresa, nadie nos apoyó, (como ahora) al contrario, a los cuates que les platicamos el proyecto se les hizo una locura, imposible que en San Cristóbalse pudiera mantener un diario independiente, sin apoyo del gobierno, sin subsidio del PRI, era absurdo. El 2 de noviembre de ese mismo año, compramos tres mil hojas de papel revolución y nos pusimos a trabajar. El DIARIO HOY salió a la luz el 3 de noviembre de 1983 y fue suspendido hasta el 7 de febrero de 1988. La suspensión del Diario Hoy es otra historia que nos liga con Jorge Enrique.

FICHA NUMERO 11.- LA REPRESION.-

Al cambio de gobierno federal con la entrada de Miguel de La Madrid, toda la porquería comenzó a desbordarse. En Chiapas, durante el sexenio anterior 77-82, habíamos tenido cuatro gobernadores (como ahora). Jorge de la Vega Domínguez fue el electo. Antes de dos años lo sustituyeron por Salomón Gonzàlez Blanco (padre de Patrocinio), que estuvo casi dos años, como ya estaba muy viejo, el que gobernaba tras el trono era Patrocinio, pero como no había gobierno (como ahora), cada quién hacía lo que quería y hubo una reseción terrible, no se autorizaban obras ni ninguna índole, el dinero lo guardaban en el banco para que produjera intereses, el gobierno estaba totalmente estancado. De repente desapareció don Salomón y nombraron a Juan Sabines que, lo primero que hizo fue retirar todas las participaciones del banco y se puso a repartir billetes a diestra y siniestra, creó un sistema denominado CODECOM que significaba convenio de confianza municipal. Formaban un patronato para la construcción de obras y ese patronato disponía del dinero, la corrupción se dio por torrentes pero los beneficios nunca llegaron y, así gobernó los dos añós siguientes pero, habían reformado la Constitución de Chiapas y, el período constitucional terminaba el 1 de diciembre, para que no coincidiera con la toma de posesión del presidente de la república lo cambiaron al 8 de diciembre, por lo tanto, hubo un gobernador de ocho días que fue Gustavo Armendariz, amigo íntimo de Juan Sabines, este cuarto gobernador fue quien entregó el poder al General Absalón Castellanos.

Con Absalón Castellanos en la gubernatura y el gordo coello en la secretaría de gobierno, no habían pasado 30 días cuando ya habían arrasado con todo lo que significaba sabinismo. funcionarios torturados por el gordo, encarcelados, muchos huyeron lejos. La represión se generalizó de tal manera que no hubo grupo que no fuera agredido. El terrorismo se generalizó en las ciudades y en el campo. Nosotros no fuimos la excepción y, nuestros nexos periodísticos con Jorge Enrique nos llevaron a conocer la cárcel de cerro hueco (como visitantes y jorge como huésped), del 13 de mayo de 1986 hasta el 7 de febrero de 1988. (Este sería otro capítulo de otro libro).

Durante el sexenio castellanista, el DIARIO HOY era un periódico que se había ganado el mote de "oposición", de vez en vez de "comunista" y lo empezaron a ligar con las actividades de don Samuel Ruiz, porque coincidiamos en publicar los atropellos que hacía la policía en las comunidades indígenas, además de criticar abiertamente al gobierno.

En esas fecha ya no le hacíamos solamente de periodistas, Avendaño defendía jurídicamente a casos de indígenas presos, la lucha social era efervescente, las organizaciones OCEZ-CNPA, CIOAC, La casa del Pueblo de Carranza, entre otras, eran las "radicales" y publicábamos sus protestas y denuncias que hacían. La sociedad coleta ya estaba muyu fraccionada, el movimiento magisterial todavía tenía fuerza aunque muy dividido pero se mantenían peleando democráticos vs charros. El General Absalón tuvo que cambiár más de cuatro veces su gabinete, la falta de organización, la poca experiencia del general, el manipuleo que se daban los javieres (López Moreno en la Secretaría de Educació y Cultura y Coello Trejo en la secretaría de gobierno) propiciaron una anarquía total dentro del gobierno y el general sólo servía de parapeto. El diario HOY cumplió toda una etapa de información bastante rústica pero real de aquellas fechas. Durante esos seis años, tuvimos que replegarnos únicamente en el trabajo del taller, decidimos renunciar a otro tipo de trabajo para no tener compromiso con ningún grupo. Avendaño había sido catedrático de la UNACH en la escuela de derecho y en la preparatoria, pero los pleitos internos en ambas instituciones, obligaban a tomar una postura neutral para informar sobre lo que hacía uno y otro bando. Esa fue la época de oro de los porros en la escuela de derecho. Como consecuencia de ese desorden gubernamental, las presidencias municipales las vendían al mejor postor y, así llegó Gustavo Moscoso a la presidencia que se la "voló" a su amigo Jorge Mario Lescieur Talavera. Epoca de total corrupción y desvergüenza.

FICHA NUM. 12.- LA PARANOIA DE PATROCINIO

A principios de 1988 nominaron a Patrocinio como candidato a la gubernatura de Chiapas. Uno de sus primeros actos fue poner en libertad a los siete. Jorge Enrique, German y Rubén Jiménez, Julian y Jacobo Nazar, Manuel Hernández Y Jesús López Constantino, que habían sido encarcelados por ser "luchadores sociales" en 1986. Al salir Jorge Enrique de la cárcel, decidimos cancelar el DIARIO HOY, para eliminar todo nexo que pudiera haberse dado con el gobierno que encabezaría Patrocinio. La campaña de Patrocinio da para muchos libros más.

Con patrocinio al gobierno, la represión fue selectiva, sólo asesinó a líderes y dirigentes de organizaciones.

Pero como ya me cansé, es hora de comer y se hace tarde para hacer la maleta donde voy a enviar este paquete, lo dejamos para otro día.

Saludos y besos al bebé y July. Mamá