"Los dilemas actuales de los capitalistas", fue el tema que trató en su Conferencia el Profesor Immanuel Wallerstein, Director del Centro Fernand Braudel para el estudio de la economía, los sistemas históricos y las civilizaciones, de la Universidad de Binghampton en Nueva York.

El importante evento se dio en el Centro de Investigaciones Humanísticas de Mesoamérica y el Estado de Chiapas (CIMECH-UNAM) en esta Ciudad el 13 de febrero actual.

Los capitalistas tienen dos objetivos: Las ganancias y, la acumulación de capital; la globalización para esta empresa comenzó hace 400 años. Para lograrlos tienen que remontar la lucha de clases, dado que requieren la fuerza de trabajo de los pobres. Esta confrontación de la desigualdad se da recurrentemente porque, cuando las circunstancias lo permiten, los capitalistas ceden al reparto de ganancias aumentando los salarios. Cuando no les conviene, simplemente emigran con sus fábricas en busca de sitios favorables.

En esta dinámica, en el nuevo sitio que se instalan, reclutan obreros rurales. Proletarizan el campo; pero a los 20 años comienzan las inquietudes de los obreros que reclaman mejores salarios, servicios sociales, democracia y, entonces los capitales se irán a otros sitios para instalarse.

Así, los capitalistas van desnaturalizando el mundo; ruralizan la zona urbana o proletarizan la zona rural. Llegará pronto el momento en que se agotarán los espacios de ubicación.

Por otro lado, dice el Presidente de la Asociación Mundial de Ciencias Sociales, Wallerstein, que los capitalistas tienen cada vez más problemas. Las materias primas se agotan y, por otro lado ha surgido el fenomeno de la "externalización" de los costos. Ante la demanda aumentan los costos y por otro lado, no encuentran en dónde echar la basura que generalmente es tóxica.

Para estos efectos (la externalización) el Estado ayuda a los capitalistas. Los servicios sociales que requieren los obreros los absorve el gobierno. Así la educación, la salud y otras necesidades sociales corren a cargo del Estado.

Dice Immanuel Wallerstein, Profesor de Altos Estudios en Ciencias Sociales de París, que el cuidado de la Ecología no es nuevo; pero (ahora) sí es urgente protegerla. El Estado debe limpiar el mundo de los capitalistas; pero el problema es el dinero y, se tiene que proteger el futuro. Ahora los capitalistas deben pagar lo que antes no pagaban.

Es aquí donde se recurre a los impuestos para limpiar la basura que dejan los capitalistas; por lo tanto, resultan más difíciles las ganancias.

Más allá aparece cada día la democratización del mundo que reivindica los derechos de la gente. Reclama comicios, educación, salud; la seguridad social que va más allá de la prestación de trabajo en la fábrica.

Hay pueblos más avanzados, como los E.U. que reclaman hasta servicios educativos universitarios; mientras que hay países en donde el reclamo social no pasa de la educación elemental.

En cuestión de salud va desde la investigación, alta cirugía, centros de salud, casas de salud; en ese orden según el avance de cada país; pero ¿quién paga todo esto? Por lo mismo, cada día pagamos más impuestos que antes. La crisis fiscal es problema de todos los países; pobres o ricos. Todos.

Ahora hay una ofensiva para reducir los salarios, es la ofensiva neoliberal que lucha porque los costos los pague el gobierno (el Estado). Es un círculo vicioso. Alguien tiene que pagar los gastos sociales.

Immanuel Wallerstein, (historiadores como él hay dos o tres por siglo; opina Andrés Aubry); dice que el gran dilema de la humanidad es:

1.- La derrota de la vieja izquierda (comunistas, socialistas, social demócratas, etcétera); que prometía tomar el poder estatal y,

2.- Cambiar el mundo.

Ya tomaron el poder; pero no han cambiado el mundo. No transformaron el mundo, está peor con la vieja izquierda en el poder.

Ante esta circunstancia prevaleciente, los gobernantes (de la vieja izquierda) le siguen pidiendo al mundo, paciencia; más tiempo para cambiar al mundo. Pero, los pueblos han perdido la paciencia.

Ahora el pueblo busca otras posibilidades. La gente no legitima al Estado. El grado de criminalidad está en función de cuánto los pueblos son tolerantes. Hay más crimen, más drogas, más impunidad. El pueblo comienza a protegerse, rearmarse. Pone muros alrededor de sus casas, alambres de púas; policía privada. Ya no confía en la autoridad. Es un círculo vicioso: Gobierno, no te pago más impuestos, porque no me das seguridad ni mis servicios.

Más adelante dijo el políglota Wallerstein, (el Dr. Pablo González Casanova Henriquez, al presentarme al científico social, me traducía del ingles y del francés, pero resultó mejor que todos habláramos en español); al capitalista no le gusta el Estado; aunque tiene al Estado para controlar al pueblo; para pagar la "externalización". El mejor escudo de los capitalistas es el Estado.

Es una derrota para los liberales perder el escudo para controlar al pueblo.

Por ahora dice, el autor de libros "El moderno sistema mundial", "El capitalismo histórico", "Después del liberalismo" y coordinador con la Comisión Gulbenkian del libro "Abrir las ciencias sociales", que hay una gran confusión intelectual: los liberales se dispersan; hay complicación por conflictos sociales; desilusiones.

LOS OJOS DEL MUNDO SE CONCENTRAN EN CHIAPAS.

Los pronósticos del Profesor Wallerstein, para una "globalización humanística", son a la vez dramáticos y optimistas; pues depende de la humanidad misma salir adelante hacia un mundo más habitable.

Externó el ponente que los ojos del mundo se concentran en Chiapas.

El Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) utiliza un lenguaje diferente, (no buscan el poder). Insisten en el poder local flexible (autonomía administrativa digo yo que lo escuché emocionado); buscan una vía nueva.

Apuntó Wallerstein: Chiapas, es dramático. Está en un momento de búsqueda, cuando el sistema del mundo entra en crisis mundial por las ganancias. Y se fue de largo: El capitalismo ya no va a existir en 50 años; pero ¿qué lo va a reemplazar? ¡Se va a encontrar otro sistema! Es una lucha importante que va durar 20 ó 50 años...

La estructura del capitalismo está en crisis. Es momento de posibilidad. La historia no está del lado de nadie; sino de lo que se obtiene en cada lucha; dice el humanista Wallerstein.-

Entramos en la posibilidad de crear un mundo mejor, de que debemos hacernos más imaginativos; tenemos que ser creativos.

Creemos entender en la Conferencia del profesor Wallerstein que las teorías y los sistemas económicos impuestos hasta la fecha, han complicado la vida de la humanidad. La explotación del hombre y de las riquezas naturales, es el suicidio y que es urgente utilizar la cordura para vivir y convivir como seres humanos.