Concepción Villafuerte

La semana pasada, un equipo de reporteros de Televisión Azteca estuvo en Chiapas haciendo entrevistas para hacer un reportaje en contra de los extranjeros que visitan Chiapas y especialmente San Cristóbal de Las Casas.

El 13 de febrero, la titular del programa de T.V. Azteca "Hablemos Claro", que es transmitido los domingos para contrarrestar el programa de Ricardo Rocha "Detrás de la Noticia", penetró a bordo de un helicóptero del gobierno del Estado, hasta el patio de la la escuela y Casa Ejidal de la comunidad La Realidad en la Selva Lacandona.

La señora que se dice ser una profesional del periodismo, no tuvo ni el más mínimo recato para demostrar que contaba con todo el apoyo de la Secretaría de Gobernación, del gobierno del Estado de Chiapas y obviamente del ejército federal.

El hecho que haya bajado un helicóptero en la escuela de la comunidad, es en sí una agresión; porque ese pequeño espacio no es campo apropiado para el aterrizaje de un aparato de esa magnitud, además del peligro que representa para sus habitantes.

La señora de la Vega se confabuló con el ejército y el gobierno del estado para hacer el papel de heroína y "descubir" que en La Realidad hay hombres armados y muchos extranjeros.

El helicóptero conque la señora realizó su hazaña está rentado por el gobierno del Estado y, al aceptar el reponsable de Comunicación Social, dijo que, esos apoyos se los brindan a todos los periodistas. Es decir que, la televisión privada goza de los privilegios que el gobierno del Estado le concede para hacer sus reportajes sin que le cueste un solo centavo a la empresa, pero sí a costas de los impuestos. Además reconoce el empleado del gobierno que así lo hacen. Mayor cinismo no existe.

Dos días después, la heroína de T.V. Azteca, hizo alarde de su descubrimiento en el programa de que ella es titular. Invitó al subsecretario de Población para mostrarle el video en el que descubrió que habían extranjeros en La Realidad; como si gobernación no lo supiera. Además la señora de la Vega ofreció como prueba el video que tomaron sus agentes para que la SG proceda en contra de los extranjeros que permanecen en los Campamentos Civiles por la Paz en todos los pueblos que están rodeados por el ejército federal y que, son observadores internacionales.

La señora de la Vega hizo alarde del "extranjerismo" que hay en Chiapas y condenó a los extranjeros porque están sublevando a los indígenas chiapanecos.

Para adornar su video entrevistó al presidente priísta de Chenalhó, a un regidor priísta de San Andrés, al presidente priísta de San Cristóbal, al presidente priísta de Chamula y todos le respondieron lo mismo, es decir, lo que ella pretendió manipular: la fobia contra los extranjeros.

La campaña contra los observadores extranjeros es una guerra declarada en contra de quienes vienen a cerciorarse de las condiciones inhumanas en que l viven los pueblos indios.

Si el gobierno mexicano no tuviera nada qué ocultar, no tendría por qué desatar una campaña xenofóbica que los observadores extranjeros será lo primero que observen.

En ese mismo programa que la señora de la Vega arremetió contra todos los extranjeros, -como si ella fuera la juez que tendría que determinar la suerte de ellos-, el primero en protestar por la manipulación de la información, fue el Diputado Gilberto López y Rivas, miembro de la COCOPA por el PRD quién al recibir una respuesta agresiva de parte de la conductora del programa, optó por retirarse para no ser cómplice del manipuleo.

Después uno a uno de sus entrevistados fue dando su punto de vista sobre el mismo tema, lo que confirmó que la señora conductora estaba totalmente fuera de contexto y de lo que podría llamarse periodismo con etica profesional. Ni siquira pudo disimular su insidia en contra de los extranjeros y el EZLN y su favoritismo hacia la SG, al grado que, el mismo Subsecretario de Gobernación se veía cohibido ante la insistencia de la locutora para que hiciera declaraciones oficiales como a ella le parecía.

El que la defendió a capa y espada fue el coordinador para el diálogo, Emilio Rabasa Gamboa quien aclaró que aclaró que no había habido previa concertación para manipular la información.

Por lo que a nosotros compete, en esta casa no volverán a poner un pie los reporteros de televisión azteca y haremos todo lo posible porque no lo hagan hasta donde sea posible impedirlo.

Lo que hacen no es un trabajo periodístico; es un trabajo de espionaje policíaco.

La señora de la Vega es la avanzada de la próxima agresión hacia los pueblos indios que la Secretaría de Gobernación y el ejecutivo federal han estado difundiendo en sus discursos.

Desde hace dos semanas, la policía de migración ha desatado una cacería de brujas en contra de cualquier extranjero que suponen viene a observar el conflicto chiapanco.

En un país donde están vigentes las garantías individuales, no importa quién o quienes vengan a observarlas. Todo lo contrario, sería un honor y mayor prestigio para el gobierno de este país, que los extranjeros se fueran admirados de la política mexicana, pero como las declaraciones no pasan de eso, de publicidad y de mentiras, la Secretaría de Gobernación trata a toda costa de desprestigiar a los observadores internacionales logrando con esto que ellos -los observadores- corroboren que la violación a los derechos humanos en el país es un hecho consumado.

La misma SG ha publicitado que han sido por lo menos 200 extrajeros expulsados de más de 4 mil que han visitado Chiapas en los diferentes lugares de conflicto.

Hace unos días fue expulsada una señora norteamericana, el acto que fue publicitado en todas las estaciones de radio y periódicos del gobierno del estado, esto ha ido creando una psicosis en contra de los extrajeros.

Lo peligroso de esta campaña no es lo que digan los periódicos, sino la estupidez de muchos ignorantes que asumen la actitud en favor de la campaña xenofóbica y realizan acciones por demás agresivas hacia los turistas en general.

Los auténticos, los priístas, la gente que no entiende o no quiere entender el conflicto, han tomado partido a favor de gobernación y contra los turistas; de tal manera que no se miden para insultarlos en la calle, negarles algún servicio, inclusive escupirlos.

Se han dado casos en una agencia de viajes que antes era del gobierno, en el que el encargado ha negado la venta de boletos a ciudadanos italianos. Obviamente los extranjeros toman su dinero y acuden a otro lugar.

Los agentes de migración interceptan en el parque central a cualquier extranjero y a veces hasta mexicanos. Les piden sus documentos y si les parece "sospechoso de zapatismo", le quitan sus papeles, lo citan a la oficina de migración, ahí lo tienen entretenido por horas o días y, al final lo expulsan.

Gobernación dijo que más de 4 mil extranjeros han visitado la zona de conflicto, de los cuales han expulsado a 200 por haberlos descubierto participando en actos políticos, tomando como prueba cualquier video en el que se asome un turista mirón en alguna de tantas marchas que se dan en esta ciudad.

Los únicos turistas que se salvan de esta xenofóbica acción, son los que se hospedan en los hoteles de lujo como por ejemplo el Ciudad Real, ya que estos turistas vienen en grupo y son conducidos con una ruta preestablecida, es decir, los únicos que ganan con este tipo de turismo son determinados hoteleros y agencias de viajes, por eso no les importa que otro tipo de turismo, como el turismo científico o cultural, permanezca en la ciudad.

Si la campaña continúa con la agresión tan fuerte que se está dando desde hace unas semanas, después del crimen de Acteal, nadie vaya a extrañarse que se desate una ola de atentados contra turistas, fomentada por ese pánico de la SG por tratar de detener a los observadores que, vienen sólo a eso, a observar y llevar el mensaje a sus países con los que el gobierno mexicano tiene tratados de comercio y transacciones económicas para que le sigan dando préstamos y continúe hipotecando la soberanía del país.

Turistas de todas las especies, CUIDAOS!

Esto es una guerra, pues...

A la Comisión Nacional de Intermediación

El día 13 de febrero e 1998 en la comunidad La Realidad, bajó un helicóptero grande de color blanco frente a nuestra escuela y nuestra casa ejidal.

Nosotros vivimos en un estado de persecución, de guerra que nos hace el gobierno y su ejército. Todos los días estamos viendo que en cualquier momento nos van a atacar; es por eso que cuando bajó ese helicóptero blanco, toda la comunidad se asustó, muchos hombres regresaron a sus milpas, todas las mujeres pararon sus trabajos y todos fuimos a ver quiénes eran los que estaban bajando.

Así, pensando que eran de gobierno y ya venían a matarnos, cuando bajó el helicóptero, salió un hombre que dijo que era de la televisión Azteca, y dijo que venían a hacer un programa para una señora que se llama Dolores. Nosotros les dijimos que no estaba bueno que bajaran así a nuestra comunidad y que vieran cómo estaban todos los niños espantados, entonces les pedimos sus credenciales para ver si no eran del gobierno o del ejército. Les pedimos que se fueran y que nos respetaran porque si no les íbamos a demandar, por estar haciendo así les pedimos su grabación que estaban haciendo y les exigimos que se fueran de una vez. Esto fue como una media hora de tiempo. Del helicóptero solo se bajó un hombre y adentro se quedó la señora Dolores y otros tres hombres que ni el sacate tocaron.

Cuando ya se decidieron irse, el helicóptero empezó a volar muy bajo, las láminas de la escuela empezaron a volar por el aire, un hombre bajó la cabeza y todos les señalamos la escuela, pero no hizo caso, entonces las láminas empezaron a caer y a lastimar a la gente. Dos de nuestros niños quedaron muy heridos y les salía mucha sangre de su cabeza. Nosotros, los de la comunidad de La Realidad denunciamos ante la sociedad civil este gran problema que tuvimos y le exigimos a esa televisión Azteca que respete nuestros pueblos indígenas, que nos trata con desprecio y con racismo, creyendo que a nosotros los indígenas siempre nos manipulan y no tenemos decisiones propias. También les decimos a la opinión pública que nuestra comunidad vive todos los días con el ejército encima, aviones y helicópteros militares sobrevuelan muy bajo y cada día son más los camiones y tanquetas que patrullan nuestra comunidad.

Los soldados todos los días pasan apuntándonos con sus armas y gritándonos groserías. Le pedimos a la sociedad civil que no crean nada cuando dice el gobierno que no nos va a matar, nosotros vemos por acá, que sí nos quiere atacar, porque exigimos que pague todos los daños que vino hacer a nuestro pueblo, porque ya nos dejó sin escuela y los niños no sabemos cómo van a quedar.

Es todo.

Atentamente

Las autoridades ejidales de La Realidad

Firman: Elías López, López, Octavio Rodríguez, Roque Rodríguez, José Manuel Jiménez, Agente municipal Delmar Pérez, Suplente Faustino Jiménez.

TIEMPO #58 Que informa y orienta Del 18 al 23 de febrero 1998